MEZCAL

Hace siglos, en las áridas tierras de Oaxaca, México, nació una leyenda que perdura hasta nuestros días. El mezcal,  la encarnación de una tradición arraigada en el corazón de la cultura mexicana.

La historia del mezcal se remonta a tiempos ancestrales, cuando los antiguos pobladores de estas tierras aprendieron a destilar el agave, la planta que se alzaba como una diosa del desierto. Fueron los misteriosos y sabios mezcaleros quienes descubrieron los secretos de la destilación y la importancia de la paciencia en su proceso. Cada agave, tras años de crecimiento, se convertía en un eslabón de la cadena que llevaba a la creación de un destilado excepcional.

En medio de este antiguo rito. Se decía que una misteriosa figura femenina, vestida con un sombrero de ala ancha y un vestido blanco como la luna, aparecía de noche para vigilar a los mezcaleros mientras trabajaban. Era la guardiana de la tradición, la protectora de los secretos ancestrales: La Calaca